domingo, 15 de junio de 2008

Cambio de pastillas de freno delanteras y algo más (2ª Parte)


Luego de haber tensado la cadena de la moto de Rodrigo y de haber lubricado su piola de embrague, procedimos a la lubricación de la cadena.

Para ello fue necesario buscar algo con qué proteger el basculante y el neumático trasero de ser salpicado con la grasa blanca de Litio. Así que recurrimos a la caja de aquél brevaje que había muerto la noche anterior, y de verdad que sirvió. Abrimos la caja y la pusimos por detrás de la cadena y por sobre el basculante, y procedimos a aplicar grasa generosamente a la cadena, moviendo la moto cada vaz que completábamos el tramo expuesto. Aquí siempre hecho de menos algún sistema de caballete central que permita mover la rueda trasera, o algún soporte giratorio en qué apoyar la rueda. Pero bueh... mientras no lo tenga, habrá que seguir moviendo la moto completa unos cuantos centímetros al ir engrasando.









La caja del Ron Santa Teresa no sólo sirvió para proteger la moto, sino también para reciclar todo el exceso de grasa que se hubiera perdido, y que ahora se pudo volver a aplicar a la cadena, idealmente con una brochita, pero a falta de ésta, con el dedo también sirve.
Creo que para esta labor sería perfecto un tubo de PVC de unas tres pulgadas de diámetro cortado a la mitad... voy a ver si encuentro algo asi para la próxima vez.

La siguiente tarea, la que da título a estos temas, el cambio de las pastillas delanteras de la Falconcita, mi segunda experiencia como mecánico de mi moto (antes había cambiado el aceite una vez).

Comencemos con la presentación de los materiales necesarios.

- Una Chicharra
- Un juego de dados
- Un destornillador de paleta
- Un juego de llaves Allen
- Una llave de torque
- Un adaptador de dados
- El juego de pastillas nuevas
- Limpiador de Sistemas de Freno
- Un vaso de refrescante Coca Cola











Las pastillas AP Racing Off Road para la XR400 que puse, y que duraron cerca de 8000 km, salieron bastante mejores que las originales Nissin que sólo duraron 5000 km. Aunque eso puede ser discutible si pensamos que unas buenas pastillas de freno provocan un desgaste menor en el disco de freno a expensas de un gasto más acelerado de ellas mismas, pero la verdad es que no logré apreciar diferencias el ello.

Los pernos que hay que soltar se pueden ver en la siguiente imagen, con sus respectivos valores de torque con los que se deben apretar luego.



Así que soltamos con el destornillador de paleta la tapa del pasador senalada con el número 2 y la retiramos, luego, con la llave allen soltamos un poco el pasador que se encuentra oculto

Luego sacamos los pernos señalados con el número 1, que fijan el cáliper a la horquilla.










Si logran ver el ojo de testigo de líquido de freno, notarán que el nivel está llegando al borde inferior... pues es hora de hacer un cambio de pastillas.
Cuando noten esto en sus motos, lo que nunca deben hacer es rellenar el depósito, porque ya no tendremos un testigo de desgaste de las pastillas, y puede ser ser que se gasten hasta frenar directamente con el fierro en el disco. Eso no sería bueno para ella.



Una vez que hemos quitado los pernos que afirman el cáliper a la horquilla, se realiza una presión fuerte empujando contra el disco, y luego tirando desde la parte central del cáliper nuevamente hacia el disco. Esto es para hacer retroceder los pistones y quede un espacio más holgado para poder sacar el cáliper sin pasar a llevar el disco de freno. El pobre ya está lo suficientemente expuesto para que además le hagamos más rayas gratuitamente. Así no nos costará nada sacarlo.






Bueh... con el cáliper ya fuera de su posición, podemos visualizar las pastillas y el espacio que dejamos al presionarlas contra el disco de freno. En ese mismo espacio podemos ahora introducir algo con qué separar aún más las pastillas, para dejar el espacio suficiente para instalar las nuevas pastillas y que entren sin problemas alrededor del disco de freno.
Las pastillas viejas son una excelente protección para realizar esta maniobra...







Debemos irnos fijando que a medida que se separan las pastillas, el líquuido de freno aumenta su nivel en el testigo, por lo que no debemos separarlas más de la cuenta, sólo hasta que el líquido haya llenado completamente el depósito.



Ahora podemos quitar defiitivamente el pasador y retirar las pastillas.



Podemos comparar el espesor de la pastilla vieja con la nueva, aunque la maldita cámara no haga buen foco, de todas maneras se nota la diferencia.




Ahora procedemos a limpiar todo el cáliper con el lipiador de sistemas de frenos, rociando abundantemente para que salgan todos los restos de plomo que eliminan las pastillas en su proceso de desgaste. En la foto se alcanza a ver el extensor del spray, pero justo no salió el chorrito. Luego secamos con un pañito y listo.



Una vez limpio el cáliper, ya es hora de instalar las pastillas nuevas en su lugar, proceso exactamente al revés de quitarlas. Se presentan en su sitio y se pone el pasador. Muy sencillo.



Creo que puede ser útil mencionar que luego de poner el pasador, es suficiente atornillarlo sólo un par de vueltas, ya que el apriete final se hará una vez que el cáliper esté en su lugar en la horquilla.
Es entonces cuando se seguirán las instrucciones del manual de servicio, donde dice que para los pernos del cáliper debe aplicarse un torque de 30 N.m y para el pasador, 17 N.m. Entonces primero apretamos los pernos del cáliper, luego el pasador y por último la tapa del pasador.





Finalmente, las pastillas nuevas deberían verse así, brillando, en espera de los "stopies" para ser probadas.





Bueno... por último, antes de salir cascando debemos hacer que las pastillas queden pegaditas al disco, ya que si salimos andando en la moto, al presionar el freno, éste no responderá. Recordemos que las pastillas estaban separadas del disco, y cuando pusimos el cáliper, éste entró fácilmente. Entonces lo que sigue es bombear con la manilla de freno hasta que ambas pastillas hayan quedano perfectamente ajustadas al disco, y como precaución, los primeros cientos de Km debemos ser cautelosos en las frenadas, hasta que las pastillas estén definitivamente moldeadas...

Espero no haber sido muy latero, pero pensando en sujetos novatos como yo mismo, que alguna vez necesité algo tan explicativo paso a paso, pensé en poner estos dos primero temas en este blog.


Saludos
CCO

lunes, 26 de mayo de 2008

El Primer Aporte. Cambio de Pastillas de Freno Delanteras y algo más...(1ª Parte)


El pasado 18 de mayo quedé de acuerdo con Rodrigo en ayudarle a tensar la cadena de su Yamaha XTZ125, y aprovechar de aprender a cambiar las pastillas delanteras de mi Falcon. Con nuestro objetivo en la mente, nos juntamos a eso de la 11:00 de la madrugada, que ese día frío y nublado me parecieron las 07:00, sobre todo después de haberme metido al sobre cerca de las 05:00 luego de haber ido a la Batuta con un grupo de amigos a escuchar los covers de U2 interpretados por la banda tributo "Lemon".

Pues bien, fue entonces que ese día amenazante de lluvia, antes de meterle mano a nuestras niñas nos dirigimos a una estación COPEC con Lavamax, para retirar todas la cochinadas que se juntan en la cadena y demases recobecos de la moto. Era un paso obligado antes del merecido enchulamiento dadas las condiciones mecánicas de las monturas.

Lo primero fué la regulación de la tensión en la cadena de la XTZ, para lo que necesitamos cargar nuestro combustible primero...





Es posible notar que la cadena de la XTZ casi tocaba el suelo en su parte más baja, Rodrigo jamás la había regulado, ni lubricado, ni la persona a quién le compró la moto tampoco. Esta cadena no tiene grandes espectativas de vida. Ojalá leas esto Rodrigo antes que sufras algún percance...



La excursión era de más de 8 cm, imposibles de medir ya que al levantarla con el dedo la cadena topaba en el basculante, y le quedaba aún más por recorrer



Procedimos entonces a aflojar la tuerca del eje trasero para soltar la rueda, con una chicharra y un juego de dados adquiridos hace un tiempo en Sodimac por la no despreciable suma de 20 mil pesos, costo que pude haberme ahorrado considerablemente si hubiera cotizado en las ferreterías de estación central, donde se encuentra un juego de calidad similar por poco más de la mitad del precio.



Una vez floja la tuerca, ya era posible mover el tensor de la cadena, con la ayuda de un pequeño martillo. La posición original indicaba que ambos tensores estaban alineados en el número tres, y dado lo suelto de la cadena nos pegamos el salto hasta el cinco.



Apretamos y el resultado fué una cadena tensa, prácticamente recta, con una excursión de menos de dos centímetros, y que no tenía excursión al montar la moto. Ante la falta del manual de la XTZ habíamos pensado darle una excursión de entre 3 y 4 cm, pero menos de dos era realmente poco.





Entonces todo de nuevo... que suelta la tuerca, que da golpecitos al tensor con el martillo para volver a la posición anterior, que se pasó de largo y llegó al dos, que la cosa debe quedar en el cuatro... okay, ahí quedó en el cuatro. Ahora el otro lado... El resultado fue una cadena con una excursión de poco más de tres cm. Excelente!, misión cumplida.





Ahora nos dispusimos a probar mi nueva adquisición, una maquinita de la cual desconozco el nombre, pero que sirve para lubricar las piolas. Es bastante probable que el nombre de la maquinilla sea algo tan simple como "Máquina para lubricar piolas", pero en todo caso el nombre da lo mismo, lo importante es que hace bastante fácil la tarea de lubricar la piola de embrague.



Para hacer esta pega primero debemos sacar la cabeza de la piola desde la manilla de embrague, quitamos la goma de protección, soltamos primero la contratuerca, luego liberamos tensión con el tornillo regulador y alineamos los cortes por donde saldrá la piola.







A esto le sigue la instalación de la maquinilla, en que debemos meter la piola por el lado, luego corremos la máquina lo más cerca posible de la funda protectora y apretamos fuertemente el tornillo de la maquinilla para lubricar.



Posteriormente utilizaremos un lubricante multipropósito y su respectiva extensión en forma de tubito plástico rojo, el que insertaremos en el orificio de la máquina destinado para ello. Ahora aplicamos el lubricante generosamente de manera intermitente, dejando pequeños lapsos de tiempo para que el lubricante penetre por la funda. Seguimos el recorrido de la piola y deberíamos en algún momento ver salir el lubricante por el otro extremo, momento en el cual nuestra tarea ya está cumplida.











Procedemos a reinstalar la piola, la regulamos e instalamos su protección.



Bueno queridos lectores, dejaremos hasta aquí este primer capítulo... pero pronto retomaremos con la segunda parte y final.

CCO